lunes, julio 10, 2006

Ha comenzado el diálogo con ETA

Ya lo ha anunciado Zapatero, ha dado luz verde para el diálogo con ETA. No sé si la reunión del PSE con Batasuna entra dentro de ese diálogo, pero bueno, si no es ese... otro acto será el que obstente el dudoso honor de ser el inicio de ese diálogo.

El PSOE sigue en sus trece, intentando vencer a ETA democráticamente, o lo que es lo mismo, sometiendo al examen popular las reivindicaciones de ETA.

En el primer "plan Patxi", cuando las elecciones vascas, pretendía dar a Euskadi un nuevo estatuto de autonomía, más amplio, y negociado por un amplio consenso, por encima del conseguido por el "plan Ibarretxe", que solo fue negociado por PNV, EA y en menor medida por IU. En éste nuevo plan se introducían como negociadores al propio PSE y a ETA a través de EHAK. La idea, la misma que la del PNV, aprobar un nuevo estatuto de autonomía más ambicioso, más autonómico, a cambio de que ETA deje las armas, pero con una diferencia: que mientras el plan Ibarretxe lo cocinó únicamente el tripartito del gobierno vasco, en este nuevo estatuto entrarían a pelar los huevos más cocineros.

Pero ETA rechazó el plan Patxi, que no contaba con las simpatías del PNV y allegados, dándole sus votos en el gobierno vasco al PNV, y dejando al PSE fuera del mismo. Y el PNV, con Ibarretxe con las orejeras puestas, los aceptó.

ETA anuncia el "alto el fuego permanente" y comienza su estrategia política. Lo primero, empieza a desvelar sus contactos con el PSE, a través de Eguinguren, personaje muy vanidoso, pero poco listo, que se ha apresurado a vanagloriarse de sus gestiones, cerrando al PSOE una salida en caso de fracaso de la tregua, hecho del que sin duda el PP tomará nota.

Y el PSOE retoma el plan Patxi, en su nueva versión Beta, en la que se incluye una demo de territorialidad con Navarra.

El plan parece interesante, la idea buena, pero el problema es que les han calado, es un plan muy evidente, y que viene de un fracaso. Al PSE le están dando largas desde el nacionalismo, haciendo que su plan sea más amplio, un plan que ya se rechazó en su día cuando no se dejó entrar al PSE en el gobierno vasco, pero Patxi insiste.

ETA le da cierto visto bueno, pero es consciente de que aceptarlo significaría su propio fracaso, el tirar por la borda 30 años de lucha armada y su desaparición. Por tanto, seguirá jugando con él, pero toreandolo. De momento, ha pedido la derogación de la Ley de Partidos.

Zapatero, consciente de sus limitaciones y de las limitaciones de Patxi, muy por debajo de la capacidad estratégica de ETA, ha puesto en frente al único capaz de parar los pies a los terroristas, al perro viejo que no se la dejará meter doblada, a Rubalcaba.

Ésta seguro que ha valorado a quien tiene en frente, alguien al que la tregua se la trae al pairo, pero que está pensando en el día después de la tregua, alguien que puede dar al traste con su estrategia. ¿Pedirá su destitución, como en su día pidió y consiguió la de su mayor y más peligroso enemigo en Euskadi, Atutxa?

Analizando la situación, en este momento recomendaría al PSOE:

1) No retirar a Rubalcaba de Interior. Rubalcaba está pensando en las elecciones de 2008, y una de sus mayores preocupaciones sería un atentado de ETA. Seguro que ya tiene pensado como corregir los errores de Eguinguren y López, para minimizar los efectos en el electorado de un atentado de ETA.

2) No derogar la Ley de Partidos. Derogarla sería darle un punto importante a ETA, y en caso de un atentado, perder claramente las elecciones, amén de no disponer de un arma jurídica para agarrar por los huevos a sus interlocutores, Batasuna, en ese "diálogo" que se avecina.

3) Atrasar a la próxima legislatura la elaboración de un nuevo estatuto de autonomía, y hacer este primer paso antes de hablar de territorialidad. En caso de aprobarse un nuevo estatuto y no haber desarmado antes a ETA, ETA saldría reforzada por el hecho de haber conseguido, mediante la lucha armada, "un nuevo marco político en Euskadi" en el que la "voluntad popular ha sido decisiva", aunque se "considera claramente insuficiente para las aspiraciones de libertad de las vascas y los vascos".

4) No minusvalorar a Batasuna. Estos son unos fanáticos, no las folclóricas histéricas de ERC, aunque sean de izquierdas y nacionalistas.

En definitiva, pintan bastos para el PSOE, ya que el plan Patxi es demasiado previsible, y eso da lugar a que sus enemigos puedan elaborar estrategias adelantándose a los acontecimientos. ETA es consciente de que si juega bien sus cartas, puede conseguir llevar la crispación y fractura social que consiguió en Euskadi, al resto del estado. Para ello ya tiene un "amigo", el PSOE, y un "enemigo", el PP. Sin consigue atraerse al PSOE lo suficiente como para que "asuma" sus reivindicaciones, como hizo en su día con el PNV, ya tiene medio camino hecho. Y el plan Patxi, tanto en versión original, como en versión Beta Demo es plantear las reivindicaciones de ETA desde el PSE.

El PSOE debe retomar las riendas del proceso, y su objetivo debe ser el que seguramente tiene en mente Rubalcaba, conseguir minimizar los efectos de la ruptura de la tregua sobre el PSOE. Si se está pensando en la ruptura del proceso en vez de en el proceso mismo, se podrá acabar con ETA, ya que conseguir que el PSOE salga reforzado de esta tregua, significa el fracaso de la estrategia de ETA, y por tanto, dar un importante golpe a ETA. Si se consigue hacer fracasar la estrategia de ETA, se puede conseguir acabar o debilitar a la base social de ETA. Y de ahí a derrotar a ETA solo hay un paso.

¿Qué pasaría con una atentado de ETA si el PSE ha asumido sus tesis a través del plan Patxi?

Se produciría una fractura social en España similar a la que ocurrió en Euskadi. Y tendriamos dos opciones enfrentadas. Los del PSOE, enemigos de España para sus enemigos, amigos de la paz para sus amigos frente a los del PP, totalmente vicevérsicos. ETA ganaría como ganó con la anterior tregua, ya que el debate ya no sería la violencia de ETA, sino el enfrentamiento entre PSOE y PP, como lo fue entre nacionalistas y constitucionalistas en Euskadi.

Hay que evitar llegar a esta fractura social, solo gana ETA.