lunes, mayo 29, 2006

Sobre ETA, después de tantos años con ella...

Como vasco nacido durante los últimos estertores del régimen fascista predemocrático, he tenido que sufrir a ETA desde pequeño.

Y ETA se ha convirtedo a lo largo de la historia de la historia de la democracia en un fenómeno social que ha conseguido marcar los derroteros de prácticamente todos los gobiernos de nuestro país.

Pero realmente... ¿Qué es lo que quiere ETA? El ideal de ETA es una Euskadi independiente y con una economía basada en el socialismo, pero un socialismo muy sui generis.

Lo que al principio era una organización marxista, fue poco a poco evolucionando hacia un comunismo un poco especial que se ha ido adaptando a los nuevos tiempos, manteniendo la esencia comunista inicial.

Debido (e independientemente) al éxito conseguido por las cooperativas guipuzcoanas sobre todo las del Grupo Mondragón, se pensó en que el control del capital del entramado empresarial podría estar perfectamente en manos de los trabajadores, en ese ideal socialista y solidario en el cual desaparece el malvado capitalista.

Y que el problema de la falta de iniciativa empresarial de los sistemas comunistas clásicos se vería compensado por la iniciativa nacida de los trabajadores socios de la cooperativa, que tan bien funciona en Euskadi, y que esa podría ser la base económica (así como nuestros baserritarras) de esa Euskadi ideal e independiente.

Se obvia el hecho de que las cooperativas son rentables y competitivas porque actúan en un entorno económico capitalista, y que son cooperativas, pero que tratan a los proveedores y trabajadores subcontratados como una empresa mercantil más (con rasgos además de impersonal multinacional) y que la riqueza creada por los bancos cooperativistas viene dada por actuar en un entorno capitalista, que los supermercados funcionan debido a los pagos aplazados (gracias a la financiación de los bancos, capitalistas ellos), etc.

Sobre el ideario socialista e independentista se podría hablar y criticar mucho, pero al final, lo que interesan son los hechos y realidades.

Funcionamiento del entorno ETA-HB

Las organizaciones comunistas clásicas funcionan mediante unos líderes o cúpula visible que organiza la estrategia o camino a seguir, en función del pensamiento de las bases. El problema que surge en estos sistemas es que las bases generalmente actúan como una masa aglutinada alrededor de un ideario comunista básico, y la cúpula no puede tomar ninguna decisión que contradiga a las bases, las cuales, a su vez, como actúan como una masa, no son capaces de transmitir ningún cambio de pensamiento a la cúpula, convirtiéndose en un círculo vicioso sin salida.

El entorno abertzale funciona de una manera muy clásica. La cúpula es la que dicta las estrategias de funcionamiento, y basa estas estrategias en lo que deciden las bases. En principio se trata de una organización "presuntamente" democrática, en la cual no se toma una decisión que no provenga del pensamiento que a través de asambleas, deciden las bases.

Pero la estructura es muy rígida. Nadie en las bases es capaz de salirse del pensamiento oficial. Quien discrepa, es expulsado además con los deshonores de ser un traidor... y los traidores lo pasan realmente mal. Por tanto, es imposible la evolución en las bases.

Y ahí es donde entra la cúpula. La cúpula, en función del pensamiento (inamobible) de las bases, es la que dicta la estrategia, estrategia destinada a conseguir los objetivos que marca el pensamiento básico comunista que antes hemos comentado.

¿Y cuales son esos objetivos? La aternativa KAS es la que dicta, en su propio nombre, el pensamiento básico alrededor del que gira la organización. Koordinadora Abertzale Sozialista, o lo que es lo mismo, Coordinadora patriota socialista. Euskadi y Socialismo.

¿Y como se alcanzarán esos objetivos? Mediante dos acciones principales: la acción política y la acción armada.

La lucha armada persigue dirigir y allanar el camino a la acción política, mediante el chantaje y mediatización que trae consigo el asesinato y la amenaza. Esta lucha armada ha evolucionado a lo largo de los años.

Primera época: La desestabilización de la democracia y la consolidación de la base social.

Durante los primeros años de ETA (m) después de la disociación producida con la muerte de franco entre los polis-milis y los más radicales de ETA-militar, el objetivo principal fue atacar la democracia, intentar desestabilizarla, con el fin último de negociar la posible independencia de Euskadi mediante el chantaje de decir "si quieres democracia, danos lo que pedimos".

Durante esos años, los ataques al ejército y a las fuerzas de seguridad fueron constantes. Se pretendía una involución, o más que nada, una amenaza de involución.

Además, se perseguía una represión en Euskadi que acercara a adeptos a la causa, o sea, fortalecer las bases mediante la entrada de gente nueva en Herri Batasuna.

En esa época surgió la "Alternativa KAS", que marcaba el pensamiento básico de la organización, nacionalismo y socialismo.

Éstos fueron los años dorados de HB, cuando más votos consiguió. Por un lado, se atentaba contra la policía nacional y la guardia civil en Euskadi (y contra el ejército en España), y luego se convocaban manifestaciones reivindicando los derechos de Euskal Herria en las zonas habituales de la juventud por la tarde y noche.

La policía nacional reprimía ferozmente las manifestaciones ilegales convocadas, y coincidían los disturbios en lugar y hora con el "poteo" de los jóvenes de cualquier capital o pueblo medianamente grande en Euskadi, con lo que se conseguía la simpatía de la juventud, que sentía esa "represión".

Sin embargo, esta captación de votos alcanzó su máximo con 300.000 votos, insuficientes, y la involución democrática se empezó a ver cada vez más lejana, con lo que empezó a ser necesario variar la estrategia.

Interperíodos: La tregua de ETA y el pacto de Lizarra

El entorno abertzale de Herri Batasuna, al mantener esa estrategia de captación de simpatías, necesitaba separarse del resto de las opciones políticas. Los nacionalistas del PNV burgués y español eran blanco de sus iras, así como los "cipayos", la policía autónoma, al servicio del PNV y de Madrid, donde gobernaba el PSOE, al que el paso por Interior de Barrionuevo, Vera o Corcuera, ineptos sin ideas que se empezaban a relacionar con el GAL y con la corrupción generalizada, no le había ayudado.

Las relaciones entre el GAL, Intxaurrondo, Amedo y Dominguez, y el ministerio del interior, minó las posibilidades de una salida negociada a la banda terrorista, y además, el secuestro de Segundo Marey, el asesinato de Muguruza, de Lasa y Zabala y otros hechos, en vez de minar el entorno etarra, lo fortalecía por el victimismo que producía. Sin embargo, el conflicto se enquistaba en posiciones inamobibles y cada vez más alejadas y sin posibilidad de mejorar. Además, el GAL quizá apaciguaba los deseos de venganza de algunas de las víctimas, y la involución democrática ya parecía imposible.

Fue entonces cuando se varió la estrategia de la banda. Se cambió la tipología de la víctima. Se comenzó a atacar la base de la democracia en Euskadi y en España, atentando contra políticos, pero selectivamente. Se inició un chantaje en "segundo plano" (ataques a batzokis, a la Ertzaina, extorsión a empresarios) hacia el nacionalismo democrático y a su vez, un ataque fuerte hacia líderes políticos no nacionalistas (asesinatos de socialistas y populares, e incluso el atentado frustrado a Aznar).

¿El objetivo? Subyugar a los nacionalistas, por la amenaza por parte del entorno abertzale por un lado y mediante el aislamiento por parte de las fuerzas políticas no nacionalistas.

Y el nacionalismo democrático, aislado, reaccionó con el pacto de la tregua de ETA a través de los acuerdos de Lizarra. ETA, después del asesinato de Blanco necesitaba aire, y ese brutal asesinato había sido utilizado por parte de los que luego se llamarían "constitucionalistas" para crear el "foro de Ermua", con el velado interés de ahogar al nacionalismo.

La salida del PSE del gobierno vasco puso además contra las cuerdas al PNV, que veía que podía perder el poder, y el pacto de Lizarra, además de un giro hacia las posturas más nacionalistas del PNV, le supuso también una entrada de aire.

El PNV abandonó las posturas moderadas que sobrellevaba con Ardanza, y pasó al nacionalismo reivindicativo de la era Ibarretxe. Se rompió el pacto de Ajuria Enea, y nuevos tiempos soplaron para ETA.

Segunda época: La ruptura de la tregua, la ruptura social

El pacto de Lizarra supuso una ruptura social importante. El PNV se alió con EA, y HB entró en el gobierno vasco. ETA no mataba pero marcaba la política vasca, donde la reivindicación nacionalista, hasta entonces latente, ocupaba el primer plano de las actuaciones del Gobierno Vasco.

A su vez, PSE, en manos de Redondo Terreros, y PP se quedaban aislados en la política doméstica. Se pactaban nuevas cotas de autogobierno a través del poder de los municipios y las diputaciones, buscando huecos legislativos, obviando o ignorando al gobierno central, del PP, al que se le ofrecía el caramelo de acabar con la violencia de ETA.

Pero ETA, cuando vió el tema maduro, rompió la tregua, comenzó a matar. Y PP y PSOE, en vez de intentar volver a recuperar Ajuria Enea, pacto en el cual el PNV quería llevar el protagonismo (ya que daba el protagonismo en la lucha contra el terrorismo al gobierno vasco) decidieron seguir otros derroteros, basados en la Constitución, derroteros en los que no entró el PNV ni por supuesto EA.

Y ETA matando concejales del PP y del PSOE preparó la fractura social. O eras nacionalista o constitucionalista, dos posturas sin ambigüedades, sin fisuras e irreconciliables. Ya no se hablaba de la violencia de ETA, sino de la violencia nacionalista.

¿El objetivo? Ganar las elecciones en Euskadi con un pacto de gobierno PP-PSOE, similar al que existe aún en Alava y en Vitoria y San Sebastián.

Pero la apuesta la ganó ETA. Los nacionalistas ganaron las elecciones en una participación multitudinaria. El gobierno vasco fue nacionalista, pero la ruptura social estaba servida. ETA había ganado la batalla. Ya no se hablaba de ella, las manifestaciones que se hacían no eran ya contra ETA sino de una parte de la sociedad contra la otra.

Los motivos del fracaso de esta tregua de ETA estuvieron en el hecho de que se enfrentaba el nacionalismo vasco al español del PP. Estas dos posturas enfrentadas eran irreconciliables, era imposible la negociación, y el acoso al nacionalismo ya había comenzado. ETA era consciente del fracaso de la tregua, pero consiguió enfrentar al nacionalismo contra el "constitucionalismo". En realidad, no había nada que negociar con el gobierno español. O sea daba la independencia a Euskadi, o se seguía matando... y se siguió matando.

Tercera época: El cambio en el PSE

En el PSE se vió que la situación se enquistaba, y se decidió a cambiar. En Cataluña, el cambio hacia posiciones nacionalistas les había ido bien, y se persiguió lo mismo, con Patxi López en Euskadi. La cúpula del PSE cambió, saliendo Redondo Terreros, que había cosechado la mayor debacle electoral del PSE de su historia, y se optó por un acercamiento paulatino al nacionalismo.
Y ETA actuó en consecuencia. De repente, filtró la reunión de Perpignan con ERC, parte del Gobierno Catalán, y al poco tiempo del escándalo decretó una tregua en Cataluña, poniendo al PSOE contra las cuerdas.

El guiño lanzado con esa tregua era claro. O bien el PSOE rompe con ERC, y por tanto, se rompe el gobierno catalán, quedando Cataluña en manos nacionalistas (CiU-ERC) trasladando el conflicto a Cataluña, y sobre todo, la fractura social conseguida en Euskadi, agrupando a todas las fuerzas nacionalistas en un bando, aunque ellas no lo pretendieran, o bien el PSOE sigue con ERC, y se traslada la fractura social a España entera, poniendo al PSOE del lado del PNV, ERC... y ETA.

Y el PSOE optó por la segunda de las opciones, dejando al PP solo en el bando de "los buenos", cosa de la que se aprovechó con creces. Ahora resultaba todos, excepto el PP, estaban en el bando de ETA. ETA había conseguido su objetivo, llevar la fractura social existente en Euskadi a España entera.

¿Cual era el objetivo de esa fractura social? Derrotar al enemigo, al PP. Lo que se consiguiera contra el PP sería aplicable a cualquier gobierno. Si el PP actuaba aislado contra ETA, si se conseguía que todas las fuerzas políticas reclamaran al PP un proceso de paz, si conseguía que todas las opciones para acabar con la violencia del PP se agotaran, se conseguirían los objetivos perseguidos por ETA.

El camino estaba marcado. El PP enfilaba las elecciones de 2004 con un mensaje claro. ETA estaba contra las cuerdas y si conseguía sobrevivir era gracias a los nacionalistas, a los que pactaban treguas en Cataluña y a los que gobernaban en Cataluña con los que pactaban con ETA. El PP estaba solo, pero tenía la sartén por el mango, e iba camino de repetir legislatura.

Si hubiera ganado, se hubiera enfrentado a todos, y con ETA con capacidad de matar (matar es muy fácil), con su política antiterrorista agotada hubiera tenido que ceder al final ante el enquistamiento de las posiciones y el tener a todos enfrente. O eso era lo que pretendía ETA con su política de fractura social.

Un hecho inesperado: Las elecciones de 2004

Debido a los acontecimientos del 11 M y a la entrada en el tablero del terrorismo islámico, y al cambio de gobierno, se dió al traste con el trabajo anterior.

Ahora la fractura social no tenía validez, ya que gobernaban los del bando que debía reivindicar, no los de la postura inflexible, y si el PSOE tomaba una postura de arropamiento del nacionalismo, así como de postura firme contra ETA, la fractura social, muy débil aún en España, desaparecería, y quedaría en segundo plano en Euskadi, por lo que el trabajo anterior se quedaría sin resultados.

Por otro lado, el brutal atentado islamista hizo que los ánimos de la gente hacia el terrorismo salieran del adormecimiento que 40 años de violencia dosificada habían conseguido. Un atentado con víctimas mortales quizá consiguiera resultados no apetecidos. La prueba estaba en que dos militantes abertzales habían muerto durante los días posteriores al 11 M y nadie les hizo caso.

ETA se presentó en una encrucijada, pero necesitaba volver a tomar protagonismo, y probó a hacer atentados pequeños, sin víctimas, con cierta timidez, a ver que pasaba.

Y volvió a tener suerte. Ya que mientras el PSOE empezó a alardear de la lucha antiterrorista, a la disminución de la crispación, y a la ausencia de víctimas, el PP se aferró a la idea de la supuesta debilidad de ETA gracias a su política antiterrorista.

La versión del PSOE... ETA no mataba porque había comprendido, después del 11 M, que la violencia no consigue nada, y que con talante todo se arregla.

La versión del PP... ETA no mataba porque estaba débil gracias a la eficaz política antiterrorista de Aznar, y que la debilidad del PSOE estaba haciendo que cada vez ETA creciera en intensidad en los atentados.

La realidad es que el pensamiento del PSOE estaba en otro lado, y ETA jugaba ambiguamente a crear fractura social en España...

Toma de posiciones pretregua: Las últimas elecciones vascas

De repente, y como de milagro, Batasuna permite en el parlamento de Vitoria aprobar el plan Ibarretxe, y los pardillos del PNV corren a presentarlo a Madrid. Como es lógico, el plan es rechazado, e Ibarretxe vuelve a Euskadi con su estrategia preparada.

Convoca elecciones en Euskadi, pensando en ganarlas por mayoría absoluta, como indicaban los sondeos. El siguiente paso, pasándose por la entrepierna la ley, convocar un referendum sobre el mismo en Euskadi, y pasar esos resultados a Madrid.

La condición previa, el abandono de las armas por parte de ETA. Así se conseguía legitimar la reivindicación nacionalista, y de paso, ganar el punto de haber conseguido "desarmar" a ETA. El PNV asumía todas las reivindicaciones nacionalistas de ETA, a cambio de que ETA dejara las armas, y con el referendum, pretendía ir a pedir sopitas a la comunidad internacional. "Mira, ya no hay violencia en Euskadi, la mayoría de la población vasca quiere ser independiente, o como mínimo, un estado libre asociado, y estos españoles, que son más malos que ni sé, no nos dejan".

Pero el PSOE, que ve clara la jugada, deja entrar en el juego a ETA, que también ve clara la jugada del PNV. Deja que se presente a las elecciones HB bajo el nombre de EHAK. Y encima, inicialmente le sale bordado.

PNV-EA-IU consiguen los mismos escaños que PP-PSOE. El gobierno vasco queda bloqueado. Decide únicamente EHAK. Sin EHAK en el gobierno vasco, Euskadi inicialmente parece ingobernable por la paridad de fuerzas, y ahí entra en juego el PSE con el Plan Patxi.

La idea es sencilla. En el PNV internamente ha ganado las elecciones Imaz, que está más por la labor de ser prácticos y salir del aislamiento respecto al gobierno central al que ha sometido a Euskadi Ibarretxe, del derrotado sector Egibar-Arzalluz.

El PSE cree que el PNV romperá con EA, que además, no aporta nada, y creará un gobierno estable con el PSE, dejando al PP de lado, que tampoco aporta nada, y actuar "a la catalana", con un nuevo estatuto pactado por la mayoría de las fuerzas políticas (PNV-PSE-EA-IU), apoyado por ETA a través de EHAK, estatuto que acabara con la violencia, y con las pretensiones nacionalistas del PNV.

El PSOE afrece mucho al PNV. Vitoria para el PSE, quitando al PP, que desaparecería también de la diputación alavesa, la cual pasaría a manos del PNV... y sobre todo, un nuevo estatuto que se aprobaría en Madrid, como el catalán, contra viento y marea. A cambio, el protagonismo de acabar con ETA para Zapatero...

Pero ETA actúa y permite un gobierno vasco nacionalista con el voto de EHAK, vuelve a recuperar el control que se le estaba escapando de las manos. Ahora, mediante el acoso al PNV (atentados en Getxo y ataques a batzokis) y la amenaza de romper la estabilidad del gobierno vasco, comienza una nueva estrategia. Pretende obligar al PNV a realizar el famoso referendum, pero sin el cese de la violencia previo, lo cual legitimaría el uso de la violencia para conseguir la independencia...

La tregua: ETA juega con ventaja

ETA se presenta de repente, por el movimiento de todas las fuerzas políticas, en una situación privilegiada para negociar, o como mínimo, para sobrevivir. Con el PNV cogido de los huevos, el PSOE sin baza que jugar y el PP con la única baza del terrorismo como opción para ganar las elecciones de 2008.

Y plantea un "alto el fuego permanente". La idea, sencilla. Se negocia lo que se quiere negociar, con la famosa mesa de partidos en la cual el PNV y los nacionalistas van a dar legilimidad y volumen a las reivindicaciones de ETA, y en caso de fracasar las negociaciones, ETA volverá a matar, volverá a romper la tregua (y van...), con la justificación de siempre, o sea, la reivindicación nacionalista, esa en la que no están dispuestos a hablar "los de Madrid".

Y todos se presentan a negociar con ETA con un paso perdido. El PNV, con el gobierno vasco pendiendo de un hilo. El PSOE, a sabiendas de que un atentado de ETA podría ser un arma muy poderosa en manos del PP, y el PP... sin nada que perder, a esperar. ETA tiene la sartén por el mango en esta negociación.

Y ETA reivindica autogobierno y territorialidad.

¿Y qué se le ofrece de momento a ETA? Por supuesto, nada, lo cual es frustrante para una organización terrorista, que después de 40 años, se encuentra como al principio, o sea, ilegalizada y sin independencia ni socialismo. ¿Se legaliza a HB? Pues entonces volvemos a los logros de... 2002, o sea, que sigue como al principio.

¿Por qué, después de 40 años y seguir como al principio, ETA se va a rendir sin más ni más?

El futuro: Cambio de manos del mango de la sartén

A poco que analicemos como funciona ETA y el por qué de su éxito y su supervivencia, llegamos a la conclusión de que esa supervivencia se debe a dos motivos:

1) A la utilización política de la violencia.

2) A una importante base social.

Para acabar con ETA es necesario acabar con alguna de las dos causas de su supervivencia. Si se consigue que la violencia no pueda tener rendimiento político, se conseguirá acabar con ella. El pacto por las libertades inicialmente perseguía ese objetivo, o sea, que ni PSOE ni PP utilizaran la violencia de ETA para obtener rédito político propio, ya que ese rédito político propio conseguiría dar más rédito político a ETA, pero al utilizar ese pacto en contra del nacionalismo, solo se consiguió dar alas a ETA, que poco a poco trasladó el conflicto a la calle, consiguiendo la ya comentada fractura social en Euskadi, que se trasladó a España entera.

Por otro lado, el intento, mediante la ley de partidos, de acabar con la base social ilegalizando Herri Batasuna y la chapucera lucha política contra el entorno de ETA (cierre de EGIN y apertura de GARA, múltiples encarcelamientos de la Mesa Nacional, y las acciones en general del juez Estrella) solo consiguió la respuesta del nacionalismo y el fortalecimiento del entorno social de Herri Batasuna.

Además, ahora, después de la desastrosa lucha antiterrorista de Aznar, y el fracaso del Plan Patxi, ETA se planta ante una tregua con ciertas ventajas.

1) Tres puntos de vista distintos enfrentados en la lucha contra ETA, la postura del nacionalismo, la del PSOE y la del PP.

2) Posición predominante sobre el nacionalismo vasco, atrapado por EHAK en el parlamento vasco.

3) Posición predominante sobre el PSOE, al que un atentado le podría costar las elecciones de 2008.

Y es el turno de actuación del PSOE, que debe recoger el mango de la sartén, y el señor Rubalcaba puede perfectamente hacerlo, es lo suficientemente inteligente y sabe jugar lo suficientemente sucio como para convertir en una ventaja esta partida que comienza con desventaja.

¿Qué debería hacer?

Muy sencillo: ETA reclama territorialidad. Pues se plantea, sin miedo, un referendum en Navarra para ver si desean unirse a Euskadi en una misma comunidad autónoma. Y paralelamente, a través de la mesa de partidos que reclama Batasuna, se pacta un nuevo estatuto de autonomía para Euskadi, pactado por todos los partidos vascos, incluído HB y a poder ser, el PP.

Es atrevido, pero sencillo. En el referendum en Navarra, previsiblemente salga que los navarros quieren seguir solos. ETA deberá aceptar el resultado. Y en caso contrario, tampoco hay tanto problema, significaría que los navarros se consideran vascos por mayoría.

Y el nuevo estatuto, será consensuado por todos, no solo por el nacionalismo, como el plan Ibarretxe. ETA deberá aceptar ese estatuto.

Y ahí es donde la sartén pasa a manos del PSOE. Lo que se pacte, deberá ser refrendado por el pueblo, en referendum. Si lo pactado no lo acepta ETA, se estará a un paso de romper la base política de Herri Batasuna, será su propio fracaso y el principio del fin de ETA, ya que sin base social... poco futuro le queda.

¿Y por qué ahora es posible romper la base social de ETA? Sencillamente, porque hasta ahora, desde la anterior tregua, se había sentido arropada por el nacionalismo, y con un enemigo en frente que presentaba una posición cerrada. Al no haber habido ninguna negociación, ETA podía mantener de cara a las bases una reivindicación nacionalista, reivindicación asumida por la "mayoría de los vascos" y contraponer a la misma la cerrazón del "estado opresor español". Con un nuevo estatuto, con el que esté de acuerdo el nacionalismo vasco, se le acabó la reivindicación nacionalista, y con el referendum en Navarra y la aprobación de ese nuevo estatuto, se acabó la cerrazón del "estado opresor español".

El entramado social de Herri Batasuna podrá ser derrotado y asimilado por el nacionalismo, al asumir sus reivindicaciones, como pretende el PNV, y ya no habrá enemigo al que doblegar, con lo que los rescoldos de ETA podrán ser eliminados rápidamente.

Además, la errónea postura del PP, que se está equivocando (nunca había imaginado Zapatero que hubiera tenido una oposición tan sencilla de acallar) focaliza al enemigo de ETA en ellos, quedando el PSOE con las manos libres para actuar.

A ver si aciertan, y consiguen derrotar a ETA, de una vez por todas, con inteligencia y astucia... si ese es su objetivo, claro.

Además, después de los últimos actos del juez Grande Marlaska contra Otegi y compañía, el aviso está claro, se os está perdonando la vida, en caso de fracaso, además del ataque a la base social de Batasuna... todos a la cárcel.

Esta vez, si lo hace bien, el que no se juega nada en esta tregua, es Zapatero, que tiene mucho que ganar y poco que perder.

miércoles, mayo 24, 2006

Sobre la conspiranoia

La teoría conspiranoica, desde el punto de vista teórico

Después de más de dos años desde que Mugica y compañía desde sus respectivos púlpitos comenzaran con la teoría conspiranoica, ésta ha alcanzado unas cotas de tal complejidad que ya resulta imposible ni siquiera seguirla. Ya es imposible rebatir con argumentos a un conspiranoico de los convencidos porque enseguida te sacan a colación algún dato de su doctrina que generalmente por desconocimiento minucioso del mismo, te dejan sin palabras para poder discutir con ellos.

Sin embargo, la teoría conspiranoica es absurda en sí misma, y alcanza tal grado de absurdo que ningún conspiranoico se atreve por sí mismo, con los datos conocidos y publicados desde los púlpitos conspiranoicos, a formular la teoría conspiranoica al completo, sobre todo, por la facilidad con la que se podrían rebatir los postulados de la misma.

Por tanto, lo primero que voy a hacer es sentar las bases de la teoría conspiranoica. Luego me voy a atrever, con los datos que he ido escuchando sobre lo publicado, a esbozar la teoría conspiranoica al completo, tarea arduo difícil. Posteriormente voy a demostrar que es imposible eliminar a ninguno de los actores que intervinieron en dicha conspiración, para descartar la posibilidad del dicho ese de que "si de lejos parece tonto, de cerca como mínimo debe ser medio tonto", o sea atacar la base del pensamiento conspiranoico de que "algo habrá detrás de todo esto". Por último, simplemente intentaré explicar qué es lo que se persigue con esta falacia de la famosa conspiración o golpe de estado virtual.

A partir de ahí, hechos como el explosivo C4, la trama asturiana, el suicidio asistido de Leganés, la cinta de la Orquesta Mondragón, como mis queridos lectores comprenderán, me son totalmente indiferentes, ya que existe una explicación sencilla para cualquiera de estos acontecidos, y aquellos sucesos con difícil explicación, seguramente con una mezcla de incompetencia, improvisación, desconocimiento y humanidad de los responsables implicados se pueden explicar con claridad meridiana.

Y sin más dilación, comenzamos con el tocho:

Las bases fundamentales de la teoría conspiranoica

La base en la que se fundamenta la teoría conspiranoica es la frase, repetida hasta la saciedad, que reproduzco a continuación:

"Un atentado de ETA daría la victoria electoral al PP mientras que uno islamista daría la victoria al PSOE"

¿Cual es el fin último que persigue esta frase, esta base teórica? Simplemente decirnos que si ETA llevaba a cabo un atentado, el PP ganaría las elecciones, mientras que si se realizara un atentado islámico, las elecciones las ganaría el PSOE. Por tanto, en caso de que hubiera un atentado islamista, hiciera lo que hiciera el PP, el PSOE ganaría las elecciones.

De esta manera, se le retira al PP la responsabilidad última en la pérdida de las elecciones. Las elecciones las decidió el atentado, y no la reacción y gestión posterior al atentado por parte del PP.

Así pues, el que el PP señalara a ETA y a los nacionalistas, el que el PP buscara al enemigo en casa, el que el PP acusara a parte de la oposición política de ser los inductores del atentado, el que el PP manipulara y gestionara el atentado pensando en las próximas elecciones no tuvo nada que ver en el resultado de las elecciones, ya que la suerte estaba echada con un atentado islamista.

De nada sirve analizar el resultado de las elecciones, de que el mayor vuelco electoral se produjera en las comunidades autónomas vasca y catalana, de que el PP apenas bajara de votos y que quien realmente decidió las elecciones fue el electorado latente, el abstencionista, de nada sirve analizar las reacciones de popularidad que han producido este tipo de atentados en otros países como EEUU, Australia o posteriormente Inglaterra, no, Spain is different, y la reacción del PP a los atentados para nada tuvo que ver en el resultado de las elecciones.

Para cualquier persona normal, en el resultado de las elecciones intervinieron tres factores fundamentales: el atentado, la reacción del PP y la reacción del PSOE. La reacción del PSOE apenas fue apercibida por la ciudadanía en general, que buscó como fuente de información la directa, la que desde Moncloa daba el entonces ministro de Interior, Ángel Acebes. Para cualquier persona normal el atentado fue monstruoso y supuso un golpe moral importante, consiguió aturdirnos y consiguió lo que cualquier atentado de estas características, hacernos reaccionar visceralmente.

Generalmente esta reacción visceral es rápidamente canalizada por el poder, ya que una masa aturdida y rabiosa es fácilmente manipulable, y lo normal es que el sentimiento de dolor sea aglutinante. Sin embargo, en este caso, el intento desesperado por ganar unas elecciones que dieron por perdidas, hizo que ese intento de manipulación se volviera en contra de quien intentó manipular, y un voto masivo les echó del gobierno.

Pero el conspiranoico es diferente. Ignora sistemáticamente la reacción del gobierno, considerando que informó puntualmente sobre los datos que le llegaban, datos manipulados, y que se comportó asépticamente. Quien decidió las elecciones fue el atentado, según la máxima al inicio comentada, pero aún necesitó ayudas, como la manipulación del Grupo Prisa, que desinformó manipulando a la opinión pública SOBRE UN ATENTADO ISLAMISTA!!!! y sobre todo, la creación de pistas falsas, y el control de la información del PSOE, verdadero artífice del atentado.

Una vez conocida la primera base conspiranoica, aquella que quita responsabilidad en la pérdida de las elecciones al PP, aparece la segunda base conspiranoica:

"El atentado lo tuvo que promover aquel que salió ganando con él, o sea, el que ganó las elecciones o el que quería que el PP perdiera las elecciones"

Nada, como en el cluedo, todos son sospechosos... excepto el inmaculado PP. ¿Quien quería que saliera el PP del poder? Al parecer medio mundo.

Generalmente quien promueve un atentado de estas características no lo hace porque sí. Nadie mata por matar, salvo los psicópatas. Siempre se suele perseguir un fin, pero... ¿el fin de este atentado era desplazar al PP del poder?

Si yo fuera belga, pensaría que un atentado islamista en Europa, en uno de los países que apoya la invasión de Irak de forma explícita y que se ha alineado con el "Satán americano", intentaría en primer lugar atacar a este país, castigarlo por su postura pro-americana. En segundo lugar, intentaría crear inseguridad en Europa, hacerla vulnerable, crear terror (por eso se llama terrorismo), y por último, decantar la balanza de los dos bloques europeos (pro y contra Bush y su "lucha" contra el terrorismo) hacia el bloque beligerante, acallando moralmente al bloque franco-alemán, con el fin último de restar apoyo a los gobiernos árabes y de esa manera facilitar la revolución islamista radical que promueven los fanáticos religiosos árabes.

Pero no, el conspiranoico típico va más allá, y piensa que el atentado fue directamente contra el PP (algo egocéntricos nos han salido estos chicos), para echarlos del poder, y que además, los pelanas de Leganés, los moritos traficantes de hachís estaban tan versados en nuestra política doméstica, nos conocían tan bien, que sabían cual iba a ser la reacción de los españoles con el atentado... en fin.

La teoría conspiranoica al completo, en exclusiva, para todos mis lectores (que no son muchos)

Partiendo de las dos bases de la conspiranoia, las comentadas en el punto anterior, vemos que por un lado, no hace falta contar con la reacción del PP para ganar unas elecciones con un atentado de corte islamista, ya que cualquier indicio de ser un atentado islamista, por una extraña gracia divina (ver mi anterior entrada, sobre el cristianismo) hará que el PSOE gane las elecciones.

Por tanto... ¿a quien le interesa que el PSOE gane las elecciones? Aquí es donde empieza el cluedo, la búsqueda del inductor de los atentados.

Los nacionalistas

Si obviamos el hecho de que en Cataluña gobiernan el PSC junto con ERC, y que CiU sigue siendo la fuerza política más votada, y que en Euskadi gobierna el PNV en coalición con EA, y que la única posibilidad de un gobierno no nacionalista es una alianza PP-PSOE, que ya fracasó y que con Patxi López parece que no tiene visos de repetirse, a no ser que teman una suspensión de la autonomía (cosa que parece improbable por parte de los demócratas del PP según los conspiranoicos, únicos demócratas y respetuosos con la Constitución que existen) no parece que puedan querer que el PSOE entre en el gobierno, o por lo menos, la indiferencia sería la tónica.

Pero si fueran sabedores de que el PSOE les iba a proporcionar la independencia... lo verían de otra manera. Sin embargo, me da que antes lo deberían haber hablado con el PSOE.

ETA

ETA es la paradoja. Son precisamente los que creen que estaba acabada, arrinconada y contra las cuerdas los que a su vez le acusan de realizar el atentado del 11 M... curioso al menos. Pero... ¿por qué iba a pretender ETA echar al PP del poder, sabedora de que el PSOE, promotor del pacto por las libertades, iba a continuar su política antiterrorista? Sin duda, sabía que iba a cambiar esa política, ya lo habrían pactado con el PSOE.

Marruecos

Marruecos se encuentra aislado internacionalmente por la eficaz política de exteriores del gabinete Aznar. Sabe que es imposible aspirar a Ceuta, Melilla, Canarias y Al Andalus con el PP en el poder, como se demostró en la heróica acción de El Perejil. Para poder comerciar con Europa, para poder aspirar a recuperar esas tierras que por cierto nunca fueron suyas, necesitaba echar al PP del poder... ¿Habría pactado de antemano con el PSOE la recuperación de esas plazas?

Francia

Francia y Alemania se encuentran eclipsadas internacionalmente por el crecimiento exponencial de la economía española. Se está creando un nuevo eje Madrid-Londres-Nueva York, triángulo que acaparará el comercio mundial. Sobre todo Francia se encuentra herida de muerte, con la economía colapsada por la competencia española... necesita eliminar ese gobierno tan eficaz que amenaza su supremacía europeísta.

Por tanto, ya tenemos los principales culpables, que todos ellos necesitan al PSOE en el poder. ¿Quien se lo propuso? ¿Partió del propio PSOE? ¿Salió de las conversaciones de Perpignan? Nadie lo sabe con certeza, pero... el PSOE tuvo que ser un actor necesario para preparar el atentado, tuvo que ser necesariamente el inductor, el coordinador del atentado, ya que al final son necesarios todos los mencionados, y alguno más, para poder llevar a cabo el atentado.

La trama

Partiera de quien partiera la idea, se hubo que preparar el atentado. Hubo que crear las primeras pistas falsas. Luego hubo que preparar el atentado, y por último, llevarlo a cabo. ¿Quienes intervinieron? Sin duda alguna, el PSOE, los nacionalistas, ETA, las FSE, el CNI, Marruecos, Francia, EEUU, Inglaterra e Israel. Nadie está fuera de la trama, todos son actores NECESARIOS para llevar a cabo la mayor conspiración de la historia global.

Desde el PSOE se llegaron a los acuerdos pertinentes con cada uno de los intervinientes en la trama (ahora se le llama traidor, ya que al parecer no está cumpliendo los acuerdos...) ofreciendo a cada uno de ellos lo que quería.

Se necesitaba que pareciera un atentado de ETA, que los primeros datos apuntaran a ETA para confundir al gobierno de la época. Para ello, fue la propia ETA la que trabajó en ese sentido, sembrando de pistas falsas el escenario político. Intentó atentar contra el AVE, trasladó una furgoneta con explosivos que fue detectada en Cuenca, etc... Sin embargo, nadie explica el por qué de su política de atentados selectivos, el dividir a la sociedad vasca con atentados selectivos para crear la brecha entre nacionalistas y constitucionalistas, ni el intento de llevar esta división a la sociedad española con la tregua de Cataluña... esto se pasa por alto.

Pero fue ETA la que dotó necesariamente de infraestructura y logística a los autores del atentado, como lo demuestran los contactos mediante inexistentes teléfonos móviles entre etarras e islamistas encarcelados. ETA creó una infraestructura paralela para los autores del atentado. A pesar de tener dificultades para crear una red logística y de pisos francos en Madrid, los consiguió para los moros. A pesar de fabricar y robar sus propios explosivos, los compra para los moros en Asturias (aunque después de lo del C4 a mi ese aspecto se me hace como muy borroso). A pesar de utilizar sistemas de detonación capaces de saltarse los inhibidores de frecuencia de las Fuerzas de Seguridad de Estado (en adelante FSE) deciden utilizar teléfonos móviles (y tarjetas de AMENA, marca que casualmente no se comercializa en Euskadi, por lo que se obliga a hacer la manipulación fuera de casa). A pesar de fabricar sus propios detonadores, en base aluminio, deciden incorporar nueva tecnología (detonadores en base cobre, diseñados para las minas con riesgo de grisú).

¿Qué consigue con todo ese esfuerzo? Por una parte, crear una primera hipótesis de atentado que les señalara a ellos, y por otra, desvincularse tecnológicamente del mismo, de manera que si bien pareciera inicialmente que habían sido ellos, luego las pistas apuntaran hacia otro lado.

Pero la trama asturiana puede despertar sospechas entre la Guardia Civil, responsable de la seguridad de los explosivos de las minas asturianas. Es por ello que es necesario que la Guardia Civil esté en el ajo. La Guardia Civil es la que da cobertura a la captación de explosivos y su traslado a Madrid, (aunque posteriormente los conspiranoicos parece que dan poca credibilidad a esta hipótesis, ya que... ¿para qué montar esta trama si se pueden conseguir directamente los explosivos de la Guardia Civil, que ya está metida en la trama? Y entonces se opta por obviar toda esta "importante" fuente de inspiración, consiguiendo "sofisticado" explosivo militar).

Hay que entrenar al comando que realizará los atentados. Hay que darle credibilidad islamista. Es por ello que se confirma la complicidad del gobierno Marroquí, que fue el que dió cobertura y entrenamiento en su país a los responsables de la idealización del atentado. Pero para ello fue necesario expulsar a los agentes del CNI desplegados en Marruecos al servicio de su majestad Josemari y colocar hábilmente agentes propios conspiradores en Marruecos, para poder esconder esta parte de la trama a los ojos del gobierno español.

Para ello, se monta el atentado de Casablanca contra intereses españoles. El que los agentes españoles desplegados no fueran capaces de detectar a tiempo este atentado hace que sean retirados y sustituídos por otros, unos nuevos agentes que la mano negra del PSOE consigue que sean de los propios, lo cual implica la complicidad del CNI en el atentado.

Además, en plena época de lucha internacional contra el terrorismo, es más que posible que en la zona más caliente del globo, el país árabe más cercano a Europa, seguramente habría desplegados agentes británicos, estadounidenses y sobre todo, del eficad Mossad. No hay duda que conocían la trama (o son muy inútiles como espías). Es aquí donde entra Francia. Sin el apoyo de Francia, nunca se hubiera atrevido Marruecos a hacer un atentado en territorio europeo, y al contar con la cobertura de Francia, además del escudo informativo ofrecido por el CNI, los países con espías en la zona consideraron el tema un asunto doméstico, decantándose tradicionalmente por Francia, y obviando el atentado.

El atentado y los tres días posteriores al mismo

El 11 de marzo de 2004, tres días antes de las elecciones, se produce el atentado. El primero en reaccionar, Ibarretxe, condena el atentado de ETA. Posteriormente Zapatero también lo condena. Ya está la suerte echada. Subsconscientemente se ha grabado en los españoles, gracias a estos dos grandes comunicadores, que ETA ha hecho el atentado. Ha comenzado el mito.

La policía nacional informa al CNI, que a su vez indica al PP inicialmente que ha sido ETA. Acebes habla, y su suerte está echada.

La SER y El País, que están indudablemente en la trama, informan señalando a un atentado islamista. Se habla de terroristas suicidas, y se informa relacionando el atentado con la guerra de Irak.

La policía nacional, implicada también, crea pistas falsas y manipula la información, con el objetivo de confundir al gobierno. Al PP le da unas pistas, mientras informa puntualmente al PSOE sobre la realidad, por ende ya conocida, del atentado.

ETA, a través de batasuna, se desvincula del atentado. Los nacionalistas en sus regiones a través de mensajes SMS incitan al odio y a quemar las sedes del PP... la suerte está echada.

Las elecciones

Obviando la entrevista de Rajoy en El Mundo, y que el monopolio informativo es del PP (En televisión, TVE1, TVE2, Antena3 y Telemadrid frente a las autonómicas vascas y catalanas, Tele5 y el minoritario, aunque esos días "única fuente de información" Canal+; en radio RNE, COPE, ONDACERO y Punto Radio frente a la SER; en prensa El Mundo, La Razón y ABC frente a El País) al parecer la trama surge efecto, pierden las elecciones.

La eliminación de pruebas

El "suicidio asistido" de los de Leganés supuso la eliminación de los principales autores del atentado, testigos incómodos, pelanas que fueron utilizados por la mano negra socialista y el resto de los confabulados para realizar el atentado. Estos pardillos, podrían hablar. Lo más fácil era eliminarlos (esperemos que nos explique cómo, que aún no me lo han explicado) para que no hablaran.

Y al parecer, un testigo incómodo, alguien que quizá podría hablar, un GEO, también fue eliminado. La profanación de su tumba sería parte de la comedia, como haciendo ver que aún quedaban células islamistas.

Los actores necesarios

¿Puede alguno de los actores ser eliminado de la trama?

Pues va a ser que no. El PSOE, por supuesto, es el que crea la trama.

Sin ETA no hay pistas falsas.

Sin la Guardia Civil, no hay explosivo asturiano.

Sin los nacionalistas, con su pequeño papel, no se hubiera grabado subsconscientemente en la mente de los españoles la autoría de ETA.

Sin el CNI no se hubiera preparado el atentado ni se hubiera mal informado al gobierno.

Sin Marruecos no hubiera sido creíble la trama islamista.

Sin Francia el atentado se hubiera desbaratado y Marruecos no se hubiera atrevido a participar.

Sin la Policía Nacional no hubiera habido pistas falsas.

Sin el Grupo Prisa no se hubiera manipulado a los españoles...

En definitiva,TODOS LOS ACTORES SON NECESARIOS.

¿Es creíble la trama?

Pues así contada, con un pacto entre el PSOE, ETA, los nacionalistas PNV-EA-ERC-CiU-BNG, las FSE Guardia Civil y Policía Nacional, el CNI, Marruecos, Francia, Inglaterra, EEUU e Israel... pues no parece demasiado creíble, a no ser que se tome como una doctrina divina.

El porqué de la teoría conspiranoica

A mi juicio, inicialmente la trama aparece como una forma de hacer oposición. Con un PP derrotado y con fuertes luchas internas entre los liberales (derrotado Gallardón), los patriotas que utilizan a la AVT como fuerza para hacer oposición, y los tradicionalistas escondidos detrás de la iglesia, a ciertos sectores derrotados sólo les queda intentar llamar la atención.

Y es desde El Mundo, desde donde los liberales del PP comienzan con su pecualiar lucha, su peculiar oposición.

Una teoría conspiranoica al uso necesita desgraciadamente cada vez más actores para resultar creíble, y por poco a poco, a través de revelaciones (la última, la de la Orquesta Mondragón y las Gráficas Bilbaínas está ya un poco cogida por los pelos), va simplemente creando dudas sobre la versión oficial (supuesta versión oficial, ya que aún no ha finalizado la investigación del ahora denostado juez Del Olmo) y creando rumores, sin que nadie se atreva a crear la teoría conspiranoica al completo, que como se ve un poco más arriba, es simplemente delirante.

Pero poco a poco, la teoría conspiranoica empieza a interesar a los políticos de la oposición, fundamentalmente por tres razones:

1) Eliminar cualquier responsabilidad en la pérdida de las elecciones

Uno de los principales artífices de la pérdida de las elecciones del 14 M fue Aznar, que salió por la puerta de atrás de la política española, después de 8 años de gobierno que le hubieran hecho pasar a la historia de una forma positiva, a pesar de sus múltiples detractores. Y esa responsabilidad se debe aunar a los que ahora componen la santísima trinidad dentro del partido. El dedocrado Rajoy, y sus lugartenientes Acebes y Zaplana.

El que este trío intente mantenerse como opositores con capacidad para ganar unas elecciones les debe alejar de cualquier responsabilidad en la gestión del atentado. Hay que echar balones fuera como sea. Nadie en el PP les ha pedido cuentas por su responsabilidad en esos días, es un hecho que se ha borrado en la historia del partido.

Incluso cuando Gallardón dijo "algo habremos hecho mal para perder las elecciones" cayó en desgracia cuan blasfemo. No se puede entonar el "mea culpa" en este asunto.

Y la teoría conspiranoica les deja inmaculados respecto a la responabilidad en la pérdida de las elecciones. Es como si no les corriera convocatoria.

2) Atrapar al electorado

Aunque hemos visto que la teoría conspiranoica es absurda en si misma, y que cualquiera con un mínimo de criterio la desecharia solo viendo el elevado número de actores intervinientes y sobre todo, por los objetivos del atentado ¡¡¡ÚNICAMENTE ECHAR AL PP DEL PODER!!! a base de repetir y repetir el rumor, la insidiosa acusación velada, a la gente se le queda ese poso de que "algo tuvieron que ver" y cuentan con la "credibilidad" del que destapó lo del GAL.

Y quien piense que el PSOE algo tuvo que ver (o como dicen en TelespeMadrid, manipuló a través del Grupo Prisa, curiosamente diciendo la verdad, para ganar las elecciones), se convertirá en un electorado fiel, que cree que no se puede votar a esos demonios que fueron capaces de hacer "eso" (en la conspiranoia, los no iniciados creyentes ignoran sistemáticamente gran parte de lo ocurrido esos días, e intentan borrar incluso la palabra atentado...)

La teoría conspiranoica, a base de insistir, deja un poso peligroso en el electorado.

3) Eliminar cualquier responsabilidad con respecto al atentado

Poco a poco, y con el paso del tiempo, empiezan a aparecer fallos y agujeros en la seguridad. Hubo indicios sobre el atentado. Se conocían datos sobre el mismo. Como ejemplo, la trama asturiana, un agujero de seguridad enorme, quizá porque no se le dió la importancia debida, con la teoría conspiranoica deja impolutos a los verdaderos responsables de esos errores en la seguridad nacional.

Cualquiera con la responsabilidad de Acebes, habiéndo salido su jefe en la foto de las Azores, tenía que haber previsto la posibilidad de un atentado islamista. La gente a su cargo debía haber creado un departamente que estudiara las posibles pistas que indicaran esa posibilidad y desbaratarlas.

Se sabía gracias al 11 S que España había sido una base logística del terrorismo islámico. Quizá se pensó que los terroristas no sacrificarían ese santuario logístico realizando atentados, tal y como ha hecho tradicionalmente ETA en Francia.

Pero se tenía que haber previsto la posibilidad de que esas células logísticas pasaran a ser activas, y sobre todo, desbaratar y controlar todas estas células, fueran a atentar en España o fuera de ella. Sin embargo, la teoría conspiranoica desvía la atención sobre este aspecto de la investigación, haciendo recaer curiosamente la responsabilidad de estos errores de seguridad a los que en aquella época estaban en la oposición.

Cómo acabará la teoría conspiranoica

Ahora la sartén la tiene por el mango el enemigo número 1 de los conspiranoicos, el gran Satán dentro del PSOE, el nuevo ministro de interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, y es lo suficientemente inteligente como para utilizar esta conspiranoia a su antojo.

Dependerá de como pretenda llegar a las elecciones de 2008. Si quiere una balsa de aceite, de manera que quede el PP escorado hacia posiciones muy derechistas, alejadas del electorado centrista, sólo tiene que desinflarla, cosa que hará muy fácilmente por ejemplo desclasificando algún documento del CNI, alguno que diga que EEUU u otro país "amigo" avisó al PP de la posibilidad de un atentado islamista pero que no se hizo caso, o con detenciones contundentes, o con los resultados oficiales y concluyentes de la investigación... puede hacerlo de muchas maneras.

Si lo que quiere es un ambiente de crispación similar al del 14 M, o sea, movilizar al electorado abstencionista para evitar que salga el PP, dejará que la bola crezca, y crezca, y sobre todo, dará pie a que el pobre Mariano pida alguna de sus explicaciones en el parlamento, mostrando posiciones derechistas...

O quizá desaparezca por sí misma cuando se vea que ni Euskadi ni Cataluña son independientes, ni se anexiona Navarra a Euskadi, ni se cede Ceuta, Melilla, Canarias ni Al Andalus a Marruecos...

En fin, está en manos de los políticos... lo cual, para los mortales como nosotros, no sé si es demasiado bueno.

lunes, mayo 22, 2006

Sobre el cristianismo, ahora que se ha puesto de moda con El Código Da Vinci


Para empezar, y por llevarme la contraria a mi mismo, ateo yo, comienzo este blog hablando sobre la esencia del cristianismo y su evolución.

Y empezamos con una vista desde la ermita del Santo Cristo, en la cima del Aizkorri, en Gipuzkoa.

Es difícil pensar que una religión, simplemente diciendo que había que amarse los unos a los otros y pocas cosas más, consiguiera crecer, captar adeptos, ser perseguida, sobrevivir y por fin, imponerse con fuerza. ¿Como es posible eso?

Si consiguió conseguir un número importante de adeptos, y hacer que el imperio romano la persiguiera para intentar acabar con ella, cosa que no hizo con otras religiones monoteístas (el judaísmo), no fue por temas religiosos, no fue porque el nuevo Dios compitiera con los dioses romanos, que al parecer además, eran simplemente supersticiones y creencias sin demasiado fundamento, heredados de los griegos, y que permitían una separación clara del poder religioso del proveniente del estado.

Por otro lado, al judaísmo tampoco le importaba que existiera una nueva religión que pudiera competir con él, ya que los siglos de tradición monoteísta no debían preocupar a los sacerdotes judios.

¿Qué ocurrió para que tanto el poder del estado romano como el poder religioso judio intentaran acabar con el cristianismo? ¿Qué ofrecía el cristianismo tan poderoso como para conseguir sobrevivir e imponerse?

Si analizamos la base del cristianismo, se produce un cambio importante en la manera de ver a Dios. Dios pasa de ser el castigador siempre vigilante del Antiguo Testamento a un nuevo Dios comprensivo y que basa su doctrina en el amor que propone Jesucristo. ¿Este cambio es suficiente como para hacer tambalear los dos pilares de la época?

Supongamos una doctrina que se basa en la frase "Haz a los demás lo que quieras para tí mismo" (la famosa frase "No hagas a los demás lo que no quieras para tí", pero contada de forma activa, no pasiva).

Esa frase, en plan positivo, marcará la vida de Jesucristo, y será la base de su doctrina, doctrina por ende muy antigua, pero que retomó el Mesias para si. Y esa base, llevada a la práctica, significa claramente que la voluntad de obrar depende de uno mismo. O lo que es lo mismo, se carga en la esencia la Ley de Dios, y de rebote la Ley Romana. Quien cree en esa doctrina, piensa por si mismo, y desde un punto de vista siempre positivo, basada en el amor a los demás, como a uno mismo, crea su propia ética, su propia ley.

Desde este nuevo punto de vista (retomado posteriormente por los anarquistas, pero en un sentido más materialista, no tan humano) desaparece el poder externo. Ya no hay que obedecer a Roma. Roma queda por debajo de la nueva moralidad. No hay por qué rebelarse contra Roma, pero la ley romana queda por debajo de la nueva ley, la de uno mismo, que puede juzgar qué leyes cumplir de Roma.

Y Dios se hizo hombre. La alegoría de la muerte y resurrección de Cristo es muy clara en ese sentido. Dios muere, y vuelve como hombre. La Ley Divina desaparece con la muerte de Dios, y Dios se hace hombre, la nueva Ley sustituye a la antigua. El nuevo Dios misericordioso es el propio hombre, que ama a sus semejantes y actúa con ellos sin necesidad de obedecer las leyes de Dios.

Esa nueva doctrina de repente desafía al poder del imperio y al religioso judio. Los cristianos ya no tienen por qué obedecer a los dos poderes, y es más, se crea una nueva sociedad, en la que el poder (y el poder más importante es el económico) ya no depende de la ley, sino de uno mismo.

De esta manera, se crea una religión atractiva, que fácilmente gana adeptos, sobre todo entre los descontentos, apareciendo nuevos líderes que son los que llevan más allá la nueva doctrina, desafiando al poder... y entonces comienza la persecución.

¿Cuando consigue imponerse la nueva religión? Simplemente cuando se alía con el poder. Cuando la nueva doctrina alcanza el poder, se vuelve a convertir en una religión con leyes divinas, con Dios, y es hacia el final del imperio romano cuando acaba el cristianismo, apareciendo el catolicismo y otras variantes, pero como religión monoteista típica, con un Dios, unas leyes, y sobre todo, fundidas estas leyes divinas con las civiles.

Dios gana otra vez la batalla al hombre... aliándose con el poder.